Los errores más comunes al contratar un seguro de viaje (y cómo evitarlos)

Los errores más comunes al contratar un seguro de viaje (y cómo evitarlos)

Planear un viaje a solas o en familia es una experiencia emocionante y gratificante, siempre que se cuente con un buen seguro de viajes.

Programar tu próximo viaje (familiar, de turismo o de negocios) es divertido, pero también implica una serie de decisiones importantes que tiene implicaciones en la aventura. Algunas de ellas son la elección de alojamiento o el del medio de transporte, pero quizás el más importante es la del seguro. Aquí es donde entra en juego un comparador de seguros de viaje como Roams, perfecto para evitar caer en errores de tomar una decisión apresurada y desinformada.

Por lo tanto, vamos a conocer algunos errores comunes que cometen los viajeros durante la planificación y cómo evitarlos.

1. Elegir solo por el precio

Sin dudas el error más frecuente que comenten los viajeros cuando eligen un seguro de viajes es guiarse solo por el precio. Aunque lo natural es buscar el ahorro, irse por la opción más barata puede resultar caro si no se toman las precauciones adecuadas. Veamos algunas consecuencias de elegir solo por el precio:

  1. Cobertura insuficiente. Las pólizas más económicas suelen ofrecer coberturas básicas que pueden no ajustarse a tus necesidades. Decidir por el precio más bajo puede implicar que tengas un respaldo que no cubra totalmente la complejidad de tu viaje.
  2. Costos ocultos. Aun cuando algunas primas pueden verse atractivas al principio, frecuentemente las aseguradoras incurren en incluir costos ocultos cuando necesites realizar un reclamo, por lo que al final puedes terminar gastando más dinero del planeado.

Haz primero una comparación exhaustiva para evitar caer en trampas de las aseguradoras. Revisa las coberturas y beneficios de cada póliza y asegúrate que la protección está acorde a tu itinerario y tipo de viaje antes de tomar tu decisión.

2. No revisar las condiciones del país destino

Otro error que cometen muchas personas es no tener en cuenta las condiciones que indica el país de destino a sus visitantes. Cada nación tiene sus propias reglas de ingreso y requisitos, y es necesario contar con un seguro que lo contemple.

  • Situaciones específicas. Algunos destinos pueden tener altas tasas de inseguridad, riesgos sanitarios o desastres naturales frecuentes. Siempre es mejor que tu póliza te cubra ante todas estas situaciones antes de viajar.
  • Requisitos de entrada. Muchos países exigen contar con un seguro de viajes antes de ingresar. Ten en cuenta si tu destino contempla estas regulaciones para evitar que te nieguen la entrada por no contar con el seguro de viaje adecuado.

Por eso, compra un seguro que cumple con las condiciones y coberturas según el país de destino. Verifica en la póliza que todos los riesgos están cubiertos y que cubra las exigencias del país que vas a conocer.

3. Olvidarse de incluir cancelaciones o retrasos en los vuelos

Los imprevistos más frecuentes a la hora de viajar son las cancelaciones y los retrasos. Estas situaciones pueden desestabilizar tu itinerario por completo, por lo que un seguro es necesario para saber responder cuando esto ocurra.

  • Lo que podría pasar. Si tu vuelo es demorado o cancelado, podrías perderte algunas de las actividades y experiencias planificadas que no pudiste reprogramar para tu viaje. Además, los gastos adicionales de alojamiento y transporte podrían acumularse, y esto es algo que algunas pólizas cubren.
  • Evítalo con la cláusula de cancelaciones y retrasos. Junto con la póliza de accidentes y gastos médicos, puede ser la cláusula más importante de tu contrato de seguros. Te resguardará ante cualquier imprevisto, permitiéndote reprogramar tu itinerario sin preocupaciones.

Siempre asegúrate de contar con un seguro que cubre las cancelaciones o retrasos. Esto podría ahorrarte muchos dolores de cabeza y cubrir tu inversión en el viaje.

4. No comprobar los límites de la póliza

Para muchos turistas suele pasar desapercibido los límites de cobertura de la póliza de viajes. Cada seguro establece un límite sobre lo que pagará según el caso, y esto puede variar significativamente entre una empresa u otra.

Por esto debes saber que existen los límites de cobertura para los seguros, y que algunas compañías establecen máximos para gastos médicos, pérdida de equipaje o cancelaciones de último minuto. Si tus gastos superan estos límites, podrías tener que pagar de tu bolsillo el excedente, afectando tu presupuesto de viaje.

También es necesario que calcules adecuadamente tus necesidades. Con esto puedes tener una idea clara de cuánto es el dinero que puedes necesitar en caso de un imprevisto, considerando tu destino y las actividades planificadas. Por ejemplo, si piensas practicar deportes extremos, asegúrate que tu seguro cubre los riesgos asociados y que tiene una buena cobertura médica y de accidentes personales.

Antes de tomar la decisión final, comprende completamente los límites de tu póliza al comparar entre las distintas compañías, ayudándote de Roams, por ejemplo. No dudes en consultar con la aseguradora sobre cualquier aspecto que no esté suficientemente claro y de que la cobertura que elijas cubre tus necesidades.

 

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