8 aventuras que hacer en Omán

Omán es mucho más que los complejos turísticos de playa cercanos a Mascate. Adéntrate en las cordilleras, las dunas del desierto y la poco visitada península de Musandam para encontrar las mejores cosas que hacer en Omán.

1) Acampar en una tienda beduina

Puedes adentrarte en el desierto hasta las arenas de Sharqiya, conocidas localmente como arenas de Wahiba, pasando por un escarpado paisaje costero, el azul chispeante del Golfo de Omán bordeado por playas de arena blanca y pueblos pesqueros como Quriyat. No pierdas de vista a las gacelas que saltan por el polvoriento paisaje y almuerza antes de llegar al desierto.

Frente a ti se extiende una masa de dunas onduladas de arena roja y blanca, que se elevan hasta los 200 metros de altura. Te sentirás como en una montaña rusa mientras viajas por las dunas hasta el Canvas Club o el campamento de lujo Hud Hud. El Canvas Club es un campamento salvaje en su máxima expresión: alójate en una tienda beduina tradicional en el desierto y tómate tu tiempo para apreciar la quietud del desierto y el espectáculo de las estrellas. En Wahiba Sands vive una tribu beduina conocida por su hospitalidad. Tendrás la oportunidad de visitar a una familia beduina, disfrutar de un paseo en coche por las dunas y pasar por pequeños y bonitos pueblos incrustados en las montañas.

Es el lugar perfecto para una buena acampada.

2) Hacer agua de rosas con una familia local

Imagínate haciendo el sinuoso viaje hasta Jebel Al Akhdar, a 2.000 metros sobre el nivel del mar. Esta verde joya de la cordillera de Al Hajjar tiene un clima de montaña más fresco y es famosa por sus huertos frutales, que se extienden en terrazas a lo largo de las laderas de la montaña, y que también albergan manantiales naturales y aflaj, los antiguos canales de agua de Omán utilizados para el riego. Los pueblos se asoman a este dramático paisaje de picos, desfiladeros y ramblas, y de marzo a abril es la mejor época para encontrarse en la zona, cuando el aire está lleno de la fragancia de las rosas de damasco en flor. También puedes alojarte en el Anantara Al Jabal Al Akhdar Resort y añadir a su experiencia la de pasar tiempo con un anciano del pueblo, aprendiendo a hacer agua de rosas con las flores que caen en cascada por las laderas de la montaña. Conocerás a las familias que fabrican el agua de rosas en destilerías tradicionales y aprenderás las técnicas transmitidas de generación en generación.

3) Descenso en parapente hasta la playa

Musandam alberga algunos de los mejores paisajes de Omán, con imponentes khors (fiordos) que albergan delfines, amplias bahías y pueblos costeros a los que sólo se puede llegar en barco. Esta parte de Omán está separada por los EAU, por lo que es fácil llegar a ella desde Dubai y Abu Dhabi.

Six Senses Zighy Bay es nuestra elección para una estancia de lujo en esta zona, y está a unas dos horas en coche desde el aeropuerto de Dubai. Sí, podrías tomar el 4x4 todo el camino, pero si quieres llegar como James Bond, elige volar en parapente hasta el complejo para la última parte del viaje. Esta experiencia de 15 minutos comienza en las escarpadas montañas y te atarán a un parapentista profesional que te guiará hasta la bahía de arena que hay debajo. Este es uno de los mejores resorts de Omán y todas las villas con piscina son tranquilos escondites.

4) Subir a la cordillera de Hajar

Unas vacaciones en Omán no tienen por qué ser sólo de playa en Mascate. Es una gran idea combinar la playa con un refugio en la montaña, como el lujoso Anantara Al Jabal Al Akhdar Resort. El trayecto en 4x4 por las montañas ya es de por sí estimulante, pero al llegar te encontrarás con un oasis de tranquilidad, donde el personal lleva la vestimenta tradicional omaní y el servicio está a la altura para complacer a su clientela VIP.

5) Yoga al amanecer en Diana's Point

Para un momento más relajante en el Anantara Al Jabal Al Akhdar Resort, reserva una sesión de yoga al amanecer en Diana's Point, una plataforma con paredes de cristal al borde de la montaña. Llamada así en honor a la princesa Diana, que visitó la zona en una ocasión.

6) Flotar por un río lento con los niños

Puede que Omán no te venga a la mente cuando piensas en unas vacaciones en familia, pero hay un complejo de cinco estrellas que encantará a los niños. Al Waha, en el Shangri-La Barr Al Jissah Resort & Spa, es un refugio junto a la playa, a unos 45 minutos de Mascate, y una de las cosas que más nos gustan es el río lento, donde tú y los niños podéis flotar en anillos de goma entre Al Waha y su hotel hermano, Al Bandar. Hay un club infantil, minigolf, zonas de juego y la Zona de Aventura, donde los niños pueden deslizarse, trepar y jugar en los pozos de bolas hasta que quemen algo de energía.

7) Visitar los sitios del Patrimonio Mundial

Omán alberga algunos lugares fascinantes del Patrimonio Mundial, desde los Cinco Falajs, un sistema de agua único creado hace más de 2000 años, hasta la Ruta del Incienso. En tu excursión cultural por Omán, podrás visitar lugares de interés del Patrimonio Mundial de la UNESCO, como el Fuerte y la Muralla de Bahla, que incluye el Oasis de Bahla con sus zocos tradicionales, callejones y antiguas mezquitas. La muralla se extiende a lo largo de ocho millas y se remonta a la época preislámica. 

8) Caminar y explorar

El Alila Jabal Akhdar es un hotel situado a 2.000 metros sobre el nivel del mar con un entorno espectacular al borde de un desfiladero. Este paisaje escarpado y montañoso alberga este refugio de cinco estrellas, en el que se puede nadar en la piscina infinita al borde del acantilado y sucumbir a las relajantes terapias locales en el spa de última generación. Las vistas son el gran atractivo de este lugar, pero no caigas en la tentación de quedarte en un solo sitio, sal a explorar. Puedes visitar el pueblo de Al Ayn y los pintorescos pueblos abandonados de Wadi Bani Habib. Contempla las granjas en terrazas y los valles, sigue los senderos a través del wadi y pasea por las granjas en las que crecen nogales y arbustos de granada.